11 años de Cine 9009 en línea.

El próximo 19 de febrero de 2017, Cine 9009 cumplirá once años en línea. Sí, jodíos, cuéntenlos, once en total desde su inauguración en el ya lejano 2006. Y para celebrar, estamos embarcados en una minimaratón de posteos. De manera que entre el domingo 12 y el domingo 19 del febrero que ya mencionamos, habrá un posteo nuevo con una peli nueva cada día, en donde aprovecharemos de repasar algunas que vimos en el cine, y que por un motivo u otro no acabaron publicadas en su día. Y a no quejarse de que llegó demasiado tarde, que ya no las podemos ver en el cine y otras cosas. También está el cable, el streaming, los DVDs para los cuatro gatos que todavía los compran, y... er... well... medios menos legales para conseguírselas. Además, si fuera por eso, no habría posteado pelis de cine mudo que se estrenaron hace sus buenos 90 o 100 años atrás. De manera que... disfruten, y saludos para todo el mundo (eeeeeexcepto para ese perejil de allá... sí, tú, a tí te hablo... el de la IP chistosa... te reconozco, eres el imbécil que no apagó el smartphone el otro día en el cine. Cretino. Pero para el resto, saludos).

jueves, 14 de noviembre de 2013

"Escorpión" (1973).


-- "Scorpio". Estados Unidos. Año 1973.
-- Dirección: Michael Winner.
-- Actuación: Burt Lancaster, Alain Delon, Paul Scofield, John Colicos, Gayle Hunnicutt, J.D. Cannon, Joanne Linville, Mel Stewart, Vladek Sheybal, Mary Maude, Jack Colvin, James Sikking, Burke Byrnes, William Smithers, Shmuel Rodensky.
-- Guión: David W. Rintels y Gerald Wilson, basados en una historia del primero.
-- Banda Sonora: Jerry Fielding.

-- "Escorpión" en IMDb.
-- "Escorpión" en la Wikipedia en inglés.

¿DE QUÉ SE TRATA?

Un agente de la CIA llamado Cross se encuentra con un tipo al que llaman... ¡¡¡ESCORPIÓN!!! ¡¡¡BUAAAAAÁ, TENGAN MIEDO!!! (en realidad Scorpio en inglés). Ambos discuten un poco sobre una misión que Scorpio ha llevado a cabo en París (se supone que Scorpio está a contrata y hace el trabajo tan sucio que ni la propia CIA quiere meter las manos en eso, y que Cross es su contacto/sensei/manager10%). El caso es que por esto o aquello, un alto funcionario de la CIA, muy encopetao él, comienza a perseguir a Cross. Al mismo tiempo Scorpio llega hasta Estados Unidos, y allí le tienden una celada. Mientras Cross desaparece a la manera en que lo hacen los espías, Scorpio negocia ahora con la CIA misma su siguiente trabajo: ir a por Cross y matarlo. No en balde, se supone que Cross le está vendiendo secretos al "otro lado" (1973, el "otro lado" significa la Cortina de Hierro, el Oro de Moscú, los malvados comunistas comeniños, etcétera). Como Scorpio fue el antiguo discípulo de Cross, se supone que piensa como él, y por esa misteriosa telepatía mental que poseen todos los personajes necesitados de una ayudita para empujar el guión, descubre que Cross está en Viena. De manera que la persecusión parte allá, mientras Cross ha buscado asilo con un amiguete ruso. La partida está iniciada, los dados están lanzados, la suerte está echada, etcétera. Ya saben como son éstas de espías, que hay algún tiroteo, algún doblez, etcétera.

EL ESPÍRITU DE LOS TIEMPOS.

Los '70s fueron una época dorada para el cine político y de espionaje en general. Después de todo, con Richard Nixon derribado a costillas de su metida de pata en Watergate, y después de la happy/hippie década del amor libre y las tetas sin sostén, la paranoia estaba otra vez instalada en la agenda mundial. O no me van a decir que nadie sospechaba de la CIA, el Pentágono, etcétera. Irónicamente, la saga de espías por excelencia que era James Bond perdió un poco de fuelle y se volvió más familiar y autoparódica (quizás porque la realidad estaba superando las más descabelladas ficciones, o es que nadie tenía pensado ver al mismísimo Blofeld instalado en la Casa Blanca), como en "Vive y deja morir" o "El hombre de la pistola de oro". Pero surgieron imitaciones, continuaciones, etcétera. Es la época de "El día del chacal", de "Odessa", de "Los tres días del Cóndor", de "Todos los hombres del Presidente", de "Missing", de "Contacto en Francia" y "Contacto en Francia II", de "La cortina rasgada" y "Topaz", etcétera. En medio de esta oleada surgió "Escorpión", peli que se esforzó por transformarse en the next best thing en materia de electrizante cine de espías adulto. Con los resultados consabidos, y que ustedes ya conocen. Sí, no se hagan, sí conocen los resultados. Los escucho, sé lo que me están diciendo, que ni han visto esta peli, ni habían oído hablar de ella antes. A eso me refiero con "los resultados", precisamente.

¿POR QUÉ VERLA?

-- Esta peli trató de mezclar cine de espías adulto con el electrizante thriller a lo James Bond sesentero. O sea, trató de mezclar vino añejo primera selección de 20 años, con uvas ácidas y sin fermentar. El resultado es un dizlate absoluto, que se queda a medio camino de todo. Creo que el peor problema acá es la indefinición de objetivos: no se sabe bien qué historia pretendían contar. La cosa se llama "Escorpión", pero resulta que el prota no es Scorpio sino el tal Cross. Perdonable si es que por lo menos el tal Scorpio fuera un secundario de lujo. Y pues, que tampoco, porque si bien en algunos minutos es insultantemente más listo que la policía o los otros espías, en otras circunstancias se muestra como un pazguato completo a la hora de despachar al tal Cross, que tampoco es que estuviera tan escondido tampoco. Toda la secuencia de Viena parece más bien un relleno porque, bueno, con algo había que alargar la peli para que se empinara sobre la horita y media, que si lo cazaba de una nos quedábamos sin peli. Las comparaciones son odiosas, pero bien podríamos reemplazar a Cross por Jason Bourne, a Scorpio por algún asesino entrenado de la CIA (bueno, otro asesino entrenado de la CIA diferente) y al cabecilla de la CIA como el mismo, y tendríamos la trilogía de Jason Bourne (bueno, "Identidad desconocida" es de 2001, pero la novela original data de 1980, por lo que se ve que si Robert Ludlum sacó la idea de aquí, tuvo tiempo de observar los errores, pulirla y hacerla funcionar como corresponde). La peli se defiende bien en lo que es mérito propio del thriller setentero, o sea, las escenas de acción, en que las secuencias largas y con relativos pocos cortes en la mesa de edición hace que veamos las carreras completas y el agotamiento físico de los protas, en vez de tener cortes rápidos que le permitan descansar a los actores y falseen la idea de acción física misma. Burt Lancaster está bien, y Alain Delon... buenoooooo... es el chulomijo de turno, qué le vamos a hacer (pero, virtud que le redime de todos los pecados, ¡le gustan los gatos!). Paul Scofield como el espía ruso está también notablemente bien (el espectacular Tomás Moro de "Un hombre de dos reinos", por más señas). Y cuando la cosa iba más o menos aburrida, pero por algunas cosas se defendía, viene una vuelta de tuerca final tan inverosímil, que es de verla y no creerla. Por cierto, el gran aporte de Michael Winner (vaya un apellido, este tipo sí que se tiene confianza) a la Historia del Cine es haber rodado, al año siguiente de esto, la célebre "El Vengador anónimo" con Charles Bronson, por más señas. Si eres fanático de algunos de los actores de la tríada Lancaster/Delon/Scofield (este último algo difícil, pero alguno habrá), entonces esta peli valdrá el tiempo invertido, pero en caso contrario, no es la primera recomendación que se me vendría a la cabeza, si me preguntaras por dónde empezar en materia de espionaje setentero.

IDEAL PARA: Bostezar.

VIDEOS.

-- Trailer de la peli [en inglés, sin subtítulos].


No hay comentarios.:

Seguidores